Finalmente, el tema fue tan amplio que alcanzó para escribir tres artículos, lo cual me lleva también a pensar en que el desarrollo de las habilidades para ser un Gerente es una aventura que toma tiempo, dedicación y esfuerzo… pero como dije en los artículos anteriores, es muy ¡gratificante!.
Así que después de mucha investigación y de reunir varios datos obtenidos a partir de las múltiples sesiones de Coaching enfocadas en desarrollo de Liderazgo, Inteligencia Emocional y Desarrollo Profesional, voy a dejarles muchos consejos, para que convertirse en el Jefe sea un viaje gratificante y enriquecedor… prepárate que son ¡MUCHOS!
El arte de la Delegación
Muchos gerentes hemos tenido dificultades para delegar el trabajo por una variedad de razones, desde una actitud perfeccionista hasta el temor de que otros no sean capaces de realizar una tarea.
Dado que la delegación de trabajo es esencial para un buen desempeño en la administración, puedes trabajar en los siguientes puntos para mejorar en esta área:
- ¡No micro-administres!
- Cuando alguien comete un error, no lo maximizes.
- Pregúntate por qué no percibiste errores importantes antes de que se convirtieran en demasiado serios.
- No trates de gerenciar demasiadas cosas a la vez.
- Al delegar tareas, asegúrate de que estás siendo razonable.
- Establece una programación de informes cuando asignes tareas.
- Mantente disponible, pero de una manera estructurada.
- Establece una relación de confianza a todo nivel.
Proporcionar retroalimentación adecuada y recompensar
Tus colaboradores necesitan tu dirección para saber cómo mejorar el rendimiento y saber lo que están haciendo bien. Si te encuentras en este desafío, puedes:
- Prepárate para presentar algunas opciones y soluciones, cuando ofrezcas retroalimentación.
- Si has decidido dar a un colaborador una recompensa por el trabajo duro, dale también alguna opción siempre que sea posible.
- Asegúrate de que sean conscientes de las metas de la organización y de que sus metas individuales estén alineadas con las de la organización.
- Elógialos por lo que hacen, no por lo que son.
- La retroalimentación debe ser inmediata y relativa al logro.
- Dale a la gente una oportunidad justa de mejorar y apóyalos en el camino, proporcionando orientación y estructura.
El establecimiento de metas
Ser capaz de establecer objetivos a largo plazo y tenerlos en mente es esencial para una posición de gestión. Para mejorar las habilidades cuando estableces metas, puedes:
- Visualizar tus metas.
- Establecer metas que son desafiantes pero no imposibles.
- Definir metas específicas y de corto plazo.
- Fijar tus metas en términos positivos, no negativos.
- Concentrarte en la acción.
- Planificar posibles obstáculos.
- Establecer plazos.
- Recompensarte.
Solución de problemas y toma de decisiones
Escuchar, actuar y confiar en tu intuición es un arte. Como cualquier otro arte o disciplina, requiere un cierto nivel de compromiso y tiempo. Es un proceso continuo en el que siempre estamos siendo desafiados a pasar a un nivel más profundo de auto-confianza.
A veces podemos ser muy conscientes de las voces conflictivas dentro de nosotros. Una parte de nosotros puede estar emocionada por hacer cambios mientras la otra está simplemente aterrorizada. Si podemos reconocer y honrar todas nuestras diferentes voces internas y los sentimientos que se unen a cada una de ellas, entonces nuestra intuición nos mostrará el paso apropiado a seguir – el que nos mueva en la dirección correcta sin ser demasiado atemorizante para nuestros vulnerables YO – o demasiado radical para nuestro lado conservador.
Tu intuición te empujará delicadamente hacia tomar algunos riesgos apropiados y a probar cosas nuevas, lo que puedes considerar aquí son:
- Los pasos en el proceso de toma de decisiones
- Define el problema. Una buena declaración de un problema debe abordar las siguientes preguntas clave:
- ¿Cuál es el problema?
- ¿Cómo sabes que hay un problema?
- ¿Dónde ha ocurrido?
- ¿Quién está involucrado o afectado por el problema?
- Expresar el problema a través de una declaración puede ayudarte a entenderlo.
- Analiza el problema.
- Establece criterios de decisión.
- Articula tus opciones.
- Evalúa alternativas y selecciona la mejor.
A partir de aquí… utiliza tu experiencia pero también tu intuición y siempre busca el asesoramiento de otros, sin embargo también:
- Experimenta cuando sea posible
- Toma decisiones cuantitativas
- Haz seguimiento y reevaluación.
- Aprende a vivir con un elemento de incertidumbre y riesgo.
- Tómate suficiente tiempo .
- Intenta permanecer abierto y flexible.
Coaching para tus colaboradores
El coaching consiste en ayudar a los colaboradores a definir, establecer y alcanzar sus metas para llegar a su máximo potencial. Esto se logra ofreciendo orientación, información y otras herramientas de crecimiento. Un buen Coach es un individuo especial; es alguien que se preocupa, tiene tacto, sabe y tiene fe en que las personas pueden mejorar.
- Utiliza el coaching para ayudar a quienes no están realizando bien las tareas de trabajo.
- Para llevarlos a donde quieres y necesitas que estén.
- Para definir claramente las áreas de desempeño que necesitan ser trabajadas.
- Asegúrate de que tu colaborador, sabe que hay un problema de rendimiento y que él / ella necesita mejorar.
- Asegúrate de que está dispuesto a poner esfuerzo para cambiar la situación, establecer objetivos claros, cuantificables y verificables y criterios de evaluación.
- Ofrece incentivos positivos para mejorar, no consecuencias negativas por falta de mejora.
- Proporciona ejemplos de trabajo que se ajusten a sus estándares para que sepan donde necesitan esforzarse.
- Deja que encuentren su propio camino.
- Aprende a renunciar al control.
- Exige que desarrollen sus habilidades, y que asuman más deberes.
- Observa cómo hablas, es mejor dar sugerencias, no órdenes.
Motivación
La motivación es la intensidad, la dirección y la persistencia del esfuerzo de un individuo hacia el logro de una meta organizacional. Lo que sigue son solo algunos consejos para los gerentes que quieren desarrollar su capacidad de motivar:
- Mantén las líneas de comunicación abiertas – especialmente en tiempos de estrés.
- No olvides que los empleados tienen sus propias vidas.
- Permitir que tus colaboradores asuman la responsabilidad de sus propias decisiones.
- Entiende las necesidades y sus principales motivadores.
Finalmente comunicar tu visión
Una cosa es poseer una visión para la organización, pero otra completamente diferente, es conseguir que todos estén entusiasmados con esta visión. Lo que sigue son algunas ideas para comunicar tu visión.
- Intenta hacer de esto una parte de la rutina: en todas las notas de mano y notas proporcionadas a sus colaboradores, puedes imprimir la declaración de la visión.
- Comunica tu propia emoción acerca de la visión.
- Trabaja en tus habilidades de comunicación como un todo.
- Si la confianza es un problema para ti, trabaja en ella.
Podría seguir hablando, pero se nos acaba el tiempo tanto a ti como a mi… y es por esto que no me cabe la menor duda de que el camino de un Gerente es retador, pero gratificante.
Me encantaría recibir tus comentarios y tus ideas sobre liderazgo y cómo desarrollar esta habilidad, no dudes en escribirme aquí en los comentarios, que así apoyamos a más personas en el crecimiento profesional.